El plan piloto de valuación de viviendas en el territorio nacional con una firma extranjera y el Estado dominicano en 2012, con la finalidad de revaluar los bienes inmuebles suntuarios de personas físicas, se cayó, porque implicaba obtener recursos de un financiamiento externo y este no fue aprobado en el Congreso de la República.
Según técnicos de Catastro Nacional, el contrato fue rescindido en el 2020.
La valoración de inmuebles está contemplada en la Ley 253-12, de Reforma Tributaria, momento en el que se incluyeron modificaciones del gravamen de 1% de excedente, para que en adelante fuera sobre el valor de RD$6.5 millones a las viviendas a edificaciones con fines comerciales, industriales y profesionales.
En ese momento quedó a cargo de la Dirección General de Catastro elaborar un proyecto piloto de tasación de inmuebles.
Desde la aplicación de esa reforma, cambió la disposición de gravar inmuebles independientes y se comenzó a aplica al conjunto de inmuebles de las personas físicas (viviendas y solares urbanos donde la edificación ocupe menos del 30% del terreno).